Ramón Luciano Díaz

Nació el 17 de septiembre de 1933 en la ciudad de Formosa. Probablemente asesinado en la Masacre de Margarita Belén a los 43 años.

 

Alrededor del año 1955, Ramón era oficial de policía. Fue secretario del Partido Justicialista y presidente de la JP desde los años 60.
Cuando el general Pedro Eugenio Aramburu visitó la ciudad de Formosa, apareció una pintada contra el mandatario. La policía provincial creyó que Díaz había sido el encargado de ello. Para inculparlo, se imprimieron panfletos injuriosos en la sede policial y se emitió una orden de allanamiento a la casa de Díaz.
Uno de sus compañeros de trabajo tomó conocimiento de que en el ámbito policial se había dado la orden de matarlo.
En un operativo con más de quince hombres pertenecientes a FF.AA. rodearon sigilosamente el domicilio a la espera de que en alguna oportunidad Díaz saliera de su casa. Hombres de la fuerza que creían en su inocencia arribaron también al operativo y distrajeron al personal de custodia, avisándole a Díaz lo que estaba ocurriendo. Fue así que logró escapar por el fondo de la casa, refugiándose en el domicilio de personas conocidas. Al día siguiente tomó contacto con unos abogados para su protección.
El 8 de septiembre de 1976 a las 00:30 fue secuestrado en su domicilio particular ubicado en calle Mitre Nº 1162. El operativo estuvo a cargo de cuatro personas pertenecientes a Coordinación Federal, quienes golpearon violentamente la puerta de entrada de la vivienda de Ramón y lo redujeron cuando él salió a atenderlos. De inmediato procedieron a requisar la casa, robándole un reloj. Al salir, le pidieron las llaves del auto, lo ataron y lo vendaron para introducirlo en el interior del vehículo, que fue encontrado abandonado al día siguiente.
Luego del día de su detención, fue visto por un compañero de trabajo en el Destacamento San Antonio de la provincia de Formosa; había arribado al lugar en un automóvil Peugeot 504 acompañado de dos personas que no permitieron que Díaz se comunicara con este compañero. En ese momento el Destacamento Policial se encontraba a cargo del subcomisario Sixto Villalba.
A mediados de septiembre de 1976 fue visto en el Regimiento de Infantería de Monte 29, del cual una noche fue sacado junto con otras personas que se encontraban detenidas y trasladado con ellas en furgoneta por un camino de tierra a un lugar que no se puede identificar. Durante el viaje los hicieron descender a todos. Allí “Monchi” Díaz fue torturado. Luego fueron nuevamente llevados al Regimiento.
Tras varios pedidos de audiencia por parte de su esposa, el jefe del Regimiento de Infantería de Monte 20 coronel Alturria la recibió luego de seis meses de espera. Durante la entrevista le dijo burlonamente que dejara de buscarlo, que quizás estaba con otra mujer.
Ramón también fue visto detenido en la Alcaidía de Resistencia junto al “Bocha” Pereira, que era su sobrino y había sido detenido tres días antes que él; por eso se presume que fue una de las víctimas de la Masacre.